Es el año 1974. El padre de los pequeños Slava y Seryozha muere en un accidente automovilístico y la madre, enloquecida de dolor, se marcha de casa. Los hermanos son enviados a un orfanato, desde donde, unos años más tarde, Seryozha, de siete años, es acogido por una familia adinerada de Moscú que recientemente había perdido a su pequeño hijo. Slava no puede perdonar a su hermano menor por esa traición, no se comunica con él durante muchos años y le da todo su cariño a su amigo del orfanato Kolka. Entonces aparece en el orfanato una nueva maestra, Valeria, que se convierte en la segunda madre de Slavka y Kolka, y ambos se enamoran de su hija Tania.
Slava se gradúa en física y técnica, Kolka regresa de Afganistán inválido y Seryozha, que creció solo e infeliz en una familia hostil, pierde su última esperanza de reconciliación con su hermano cuando Tania se enamora de él y deja a Slava por a él. Unos años más tarde, Seryozha viene a Slava para hablar sobre su madre desaparecida, pero se emborracha y termina en la cama de la amante de Slava, donde Tania lo encuentra. Con el corazón roto, no le cuenta a su novio sobre su embarazo, aborta y se casa con Slava.
Pasan los años. Kolia tiene grandes problemas en los negocios, no quiere molestar a su exitoso amigo Slava, y va a hablar con la mafia, acompañado de Seryozha. Tania, que ni siquiera finge ser feliz en su matrimonio con Slava, le pide ayuda a su marido, y él, después de haber dado una suma enorme para rescatar a sus amigo y hermano, finalmente pierde a su esposa: ella vuelve con Seryozha. Y cuando se va, se entera de su embarazo. El niño solo puede ser de Slava. Tiene miedo de contárselo a Slava, pero el secreto oprime a los amantes e interfiere con su felicidad. Mientras tanto, Slava encuentra a su madre en un hospital psiquiátrico en Novosibirsk y la lleva a Moscú, donde la talentosa doctora Nina la ayuda a recuperar casi por completo su cordura... y se enamora de Slava. Habiendo superado viejos agravios, los hermanos finalmente dan un paso el uno hacia el otro: Slava devuelve a la madre de Seryozha, y Seryozha admite que él y Tania están criando al hijo de Slava. La familia vuelve a estar unida.