A medida que comienza la Liga de Campeones, te llevamos detrás de las escenas para presenciar cómo los mejores equipos de fútbol de Europa se preparan para sus enfrentamientos.
En Manchester, los campeones defensores se reunieron en el aeropuerto, cada jugador envuelto en sus propios rituales y preocupaciones previas al partido. Bernardo Silva, envuelto en ropa de invierno a pesar del suave clima inglés, cuestionó abiertamente la necesidad de su viaje a Copenhague. Sus quejas fueron rápidamente eclipsadas por la emoción infantil de Haaland por aventuras heladas lejos del campo de fútbol. Mientras tanto, Grealish, un poco peor por el desgaste, buscó camaradería en un brindis previo al vuelo, solo para encontrarse con preocupación en lugar de entusiasmo.
El equipo de Barcelona no fue menos animado. Mientras esperaban su vuelo a Nápoles, Lewandowski y Cancelo participaron en un intercambio cómico sobre la pronunciación correcta de 'Una pizza napolitana, por favor', para el divertimento de sus compañeros de equipo. Xavi, atrapado entre libros tácticos y visiones de Messi, se encontró en un momento poignante de reflexión y anhelo.
El contingente de Madrid convirtió la sala de espera del aeropuerto en una escena reminiscente de las vacaciones de primavera, con niveles de energía inducidos por Red Bull convirtiendo el área de espera en su patio de recreo. Bellingham, Vinicius Jr. y Rodrygo se turnaron para hacer la famosa celebración 'Siuuu' de Ronaldo, cada intento más ridículo que el anterior. En medio de este caos, Kroos y Modric ofrecieron un marcado contraste, encontrando tranquilidad en tejer y una siesta al mediodía, respectivamente.
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