Excelente mi querido joven, sigue así, pues Dios se glorificara en tí, cada vez que prediques su Palabra! La prioridad de predicar y adorar en nuestras vidas, es Cristo!!! A Él la Gloria, la Honra y el Honor! Bendiciones! 🙌🙌🙏🙏

Amén pastor. gracias por compartir esa experiencia con nosotros. a muchos nos ha pasado. saludos desde Colombia

El Espíritu Santo pondrá las palabras en su boca.

​@@martaabraham5052Siendo responsable con prepararnos ✝️🙏

Igual, la experiencia fue terrible.

Eso es lo correcto siempre predicar la cruz y su gran amor del Padre, bendiciones

Gracias por tu comentario! , te mando un abrazo de hermandad 🤗❤️🌈

Me gusta la sinceridad del Pastor, me identifico con él. cuando recién me convertí, yo sabía muy poco,admiraba a mis líderes de célula, pero en las madrugadas, Dios, me despertaba, se venían a mi mente, versículos tras versículos y yo no entendía porque, a través de un sueño o visión, Dios me mostraba unos soldados antiguos tipo cruzados, afilando sus espadas, puliendo sus armaduras,pero en el cuartel, me hacía ver qué no conocían el campo de guerra ,ni las estrategias del enemigo, que yo le tenía que dar ese mensaje, a mis líderes. En fin , traté de apuntar, algunos versículos,me prepare, puse separadores en la biblia,ordenados, y les dije a ellos después de la reunión,lo que sentía Dios, me mostró. Todo fluía, sentía la aprobación de Dios en mi corazón, el líder me dijo, que lo predicara,en la siguiente reunión, así que me preparé, lo repasé una y otra vez, me encomendé,y ese día, fue desastroso, todos mis versículos se mezclaron, dije primero el último, fue un desastre,me sentía avergonzado,que Dios me dejó a mi suerte, es más,me molesté y le reclamé al Señor. Pero en las noches sgtes. Paso lo mismo, me despertó en la madrugada,fui donde los líderes y les volví a comunicar el mismo mensaje, y esto se repitió 3 veces más, hasta que, mis hnos mayores,se molestaron,y me dijeron que era mi idea,que Dios no me había dicho nada, es más,me oraron delante de todos, porque según ellos era piedra de tropiezo,para el grupo, yo me sentía humillado, y sorprendido,de porque Dios no me ayudaba, ese mismo día ,un pastor nos visitaba, el dio el mensaje y era el mismo ,que yo les di, en mi rincón, me sentí en paz, y que menos mal ,no estaba loco. A través de otras predicas, El Señor, me explico, que el mensaje era personal, a los líderes,no para la iglesia,que debía, como buen soldado limitarme,solo a las órdenes, dar literalmente, no aumentar ni quitar nada,y solo al destinatario. Aprendí, después que para dar un a predica, no bastaba con estudiar y repasar, que si las cosas no fluían,Dios no estaba hablando, pero si fluían naturalmente y con sabiduría,que El,lo estaba haciendo, que no tenía nada de que enorgullecerse,que solo era un micrófono,que el autor era mi Señor, aprendí que la espada era de doble filo,pues les daba a otros, pero a mí también me caía. Con el tiempo,dejaba que el Señor, guiará el tema, cuando así era,toda la gente escuchaba atentamente, pero si yo lo desviaba,conforme a mis ideas, la gente bostezaba, o se iba, aprendí a botar todas mis anotaciones, y a cambiar de tema,según el Espíritu me mostraba, una vez, tenía un tema equis, y el Señor me pedía que hablara del perdón y fluyó, luego me enteré que en ese grupo había problemas, pero sobre todo aprendí a hablar de lo que yo había vivido y experimentado y no de teorías y creencias personales. El Maestro, me enseñó que, no titubeas, ni te pones nervioso,si hablas de lo que conoces, y mientras más detalles tienes,más seguridad tendrás, ejemplo. Si vas a enseñar a cocinar, enseña un plato que siempre logras, porque cuando te pregunten, que cuánto tiempo, que pasa si le echas este y otro ingrediente, a qué temperatura etc, nunca te quedes sin saber que decir. Y por último aprendí,a nunca querer quedar bien, con un mensaje que fue un éxito, cada enfermedad es diferente,y cada tratamiento también,que yo no era el médico,que como buen enfermero me dedicaré a solo aplicar la medicina que el doctor recetó,y nunca ,pero nunca recetará.

Saludos pastor del Edo De México bendiciones