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El Inti Raymi, que significa "fiesta del sol" en quechua, celebra el solsticio de invierno en el hemisferio sur, el día más corto del año, generalmente el 24 de junio. Esta ceremonia es de suma importancia para los incas, ya que el sol, conocido como inti, es considerado su dios principal y fuente de energía vital.
Durante el Inti Raymi, se llevan a cabo elaborados rituales en cusco, la capital del imperio inca. La celebración comienza en el templo del sol, o Coricancha, que es encerrado para la seguridad de los artistas. Allí se reúnen miles de personas, que llegan desde tempranas horas de la madrugada a ocupar las primeras filas, soportando el frío y el sol para elevar sus ofrendas.
Durante esta celebración se encuentran participando más de 150.000 espectadores, muchos de ellos que han venido desde diferentes partes del mundo. Para los días finales de junio, a la ciudad de cusco, en la que habitan cerca de 500.000 personas, le han entrado en el 2023 más de 80.000 turistas.
Cusco es una ciudad que respira historia y cultura en cada rincón. Está situada en el corazón de los andes peruanos, es por esto que es aquí el lugar indicado para continuar con la tradición incaica que se niega a quedar en el olvido.
La fiesta del Inti Raymi es el evento más importante para el pueblo andino, no solamente por la memoria histórica que hay aquí representada, sino por la cantidad de personas que convoca, haciendo del mes de junio un mes de bonanza para el país
debido a la duración del evento quedan pocos minutos durante éste para alimentarse, los turistas aprovechamos para ir a los restaurantes locales y así vivir la fiesta también desde los lugares más auténticos de la ciudad.
En todos los rincones de cusco se vive un ambiente de fiesta y sana diversión, para no perdernos el segundo evento del día es necesario desplazarnos hasta la plaza de armas, en donde se realiza la ceremonia de bienvenida por parte del gobernante supremo inca
El segundo acto de esta poderosa ceremonia se lleva a cabo en el corazón histórico y cultural de la ciudad. La plaza mayor, también conocida como plaza de armas, es una amplia plaza rectangular rodeada por elegantes edificios coloniales y está ubicada a una altitud de 3,400 metros sobre el nivel del mar.
Si bien en este lugar se reunían las personalidades del imperio inca a esperar la llegada del sol, su aspecto cambió radicalmente. Antiguamente se llamaba Huacaypata, que significa lugar de lamentos. Durante la invasión española, Francisco Pizarro ordenó su reconstrucción, imponiendo el estilo colonial. Por respeto a los antepasados andinos los nombres de estos lugares aún son conocidos en quechua.
Durante la invasión del imperio español esta celebración fue prohibida por considerarse pagana, fue solo hasta 1940 que volvió a las calles de la capital del imperio inca.
En este lugar el gobernador máximo agradece al pueblo inca por la lealtad y pide por la prosperidad de las cosechas, ofrendando un disco del sol a Inti.
El último acto de este magno evento se lleva a cabo en la fortaleza de Sacsayhuamán, en las afueras de cusco. Esta majestuosa construcción de piedra, con sus enormes bloques perfectamente encajados, sirve como escenario final para la culminación del Inti Raymi.
Los asistentes son testigos de la representación de la Pachamama, la madre tierra, y su papel fundamental en la cosmovisión inca. El sonido de los tambores y las flautas tradicionales llena el aire, acompañando los movimientos gráciles de los bailarines que danzan en honor a la tierra y a los antepasados.
El costo de las entradas al último acto del Inti Raymi es de 200 soles peruanos, unos 53 dólares americanos, que permiten vivir la experiencia a unos pocos metros de la presentación artística.
Al caer la tarde, cuando el sol comienza a descender, los sacerdotes incas, ataviados con trajes ceremoniales ricamente ornamentados, realizan rituales y ofrendas en honor al sol. Si bien antiguamente en el sacrificio se ofrendaba una llama, en este momento solo se simula su muerte, dando así finalización a la ceremonia.