Hoy, nos volvemos con reverencia hacia la poderosa intercesión de Santa Lucía y la benevolencia de la Virgen de Guadalupe, buscando la cura del cuerpo y del alma. Desde las primeras palabras de esta oración, nos sumergimos en la fuerza trascendental de estas dos santas, agentes divinos de curación física y espiritual. Este no es solo un video de oración; es un susurro colectivo de almas sinceras, guiadas por la sabiduría de San Benito, buscando fortalecimiento espiritual. Invocamos vuestros sagrados nombres, Santas Lucía y Virgen de Guadalupe, con corazones rebosantes de fe, en busca de la luz divina que disipa las sombras de la aflicción. Que vuestra intercesión sea el puente entre nuestras súplicas y la gracia de Dios, guiándonos en el camino de la curación y el renacimiento.