Pocas ideas cautivan la imaginación y desafían nuestra comprensión del universo como los agujeros negros. Estas oscuras regiones del espacio tiempo, nacidas del colapso de estrellas masivas, poseen campos gravitacionales tan intensos que ni siquiera la luz puede escapar de su alcance. En entenderlos, nuestras teorías físicas son llevadas al límite y nos recuerdan lo poco que sabemos sobre el universo. Se sabe que adentro de un agujero negro hay una singularidad. Las singularidades son un punto del espacio tiempo donde la teoría de relatividad general de Einstein nos dice que la atracción gravitacional y la densidad de energía son infinitas. Otra singularidad conocida es la que tuvo lugar en el inicio del universo, según la teoría del Big Bang. Sin embargo, no podemos aceptar estas predicciones simplemente porque la relatividad general no puede aplicarse a las pequeñas escalas donde predice la existencia de singularidades.