La Ascensión es mencionada por Orígenes (padre de la exegesis bíblica) en el siglo II. No ha sido integrado en el canon por la mayoría de las Iglesias, pero sigue siendo considerado un texto sagrado en la Iglesia Ortodoxa Etíope y fue recibido como inspirado por ciertas corrientes cristianas medievales como los bogomilos (movimiento cristiano heterodoxo,siglo 10) o los cátaros. Probablemente por ello, en el siglo XIX se encontraron numerosos fragmentos escritos en latín, griego, copto y eslavo. También hay una versión completa en Geez (etíope clásico).
La obra es apocalíptica y puede dividirse en dos partes:
• La primera comienza con la ascensión de Manasés, hijo de Ezequías, al trono de Judá. Isaías había predicho anteriormente que el nuevo gobernante sería un siervo del diablo y sería torturado por él. El monarca se comporta como había predicho, por lo que el profeta decide retirarse a las montañas con su hijo y otros compañeros. Pero Bechira, un falso profeta celoso, convence a Manasés para que mate a Isaías. A continuación, Isaías es aserrado con una sierra de madera, pero nunca renuncia a su fe durante su calvario.
• La segunda parte Isaías cuenta a su hijo lo que verá en el cielo después de su ejecución. Tras observar los seis primeros cielos, el profeta llega al séptimo. Allí ve al propio Dios, acompañado de sus ángeles más importantes, incluido su "hijo amado", Jesucristo, que le habla de su futuro destino.