Marrakech es una de las ciudades más importantes dentro de el reino de Marruecos. Es la cuarta ciudad más grande después de Casablanca, Fes y Tánger. Situada a faldas de la Cordillera Atlas y rodeada de murallas rojas que dieron el apodo a la ciudad roja, esto es Marrakech.
Esta ciudad ha estado en la lista de los más aventureros y exploradores durante años pero recientemente se ha convertido en una visita obligatoria para los amantes de la comida como yo y quiero saber por que.
La comida marroquí es una de las mejores cocinas de nuestro planeta y todo el mundo lo sabe, piensa en olivas, limones en conserva, un montón de frutas, té de menta, tagine de pollo tierno, paloma, perejil, comino, canela y tantas otras especias ..!
Influenciado por las cocinas árabes, francesas y andaluzas Marruecos es una deliciosa combinación de sabores y colores que la hacen única.
Marrakech es el hogar de algunos de los zocos más grandes (así llaman los mercados tradicionales) del país y como en muchas ciudades marroquíes los zocos están llenos de vendedores artesanales bereberes y puestos llenos de productos. (Desde las alfombras a la electrónica)
Jemmaa el Fna, es la plaza más concurrida de toda África y durante el día está predominantemente ocupada por puestos de jugo de naranja, vendedores de agua con bolsas de agua de cuero tradicionales y tazas de latón, jóvenes con monos Barbary encadenados y encantadores de serpientes a pesar del estatus protegido de estas especies bajo la ley marroquí.
A medida que avanza el día el entretenimiento en oferta cambia: los encantadores de serpiente se apartan y tarde en el día la plaza se vuelve más concurrida.
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