Mesianismo judío, el Yanuka, cual es mi opinion y cuales son las bases.
La creencia en un mesías, una persona que redimirá al pueblo de Israel y marcará el comienzo de una era más perfecta, se ha considerado durante mucho tiempo un elemento central de la creencia judía.
La creencia en un mesías , una persona que redimirá al pueblo judío, reconstruirá el Templo en Jerusalén, resucitará a los muertos y marcará el comienzo de una era de paz perfecta, ha sido evidente en el pensamiento judío durante al menos dos milenios.
Hay escasas referencias a tal persona en el tanaj . La palabra hebrea para mesías, mashiaj (literalmente, “el ungido”), aparece varias veces, aunque casi nunca en relación con un redentor que vendrá al final de los días. En el tanaj, la palabra se usa para describir a un rey o sacerdote con un propósito divino especial. Isaías 45:1 se refiere al rey persa Ciro como el ungido de Dios, porque Dios hizo que permitiera que los israelitas regresaran de su exilio en Babilonia .
Varios de los últimos profetas hablan en detalle de una era futura marcada por la paz y la prosperidad, muy especialmente Isaías, con su famosa profecía de un día en que "el lobo morará con el cordero", pero ninguno se refiere a la persona que traerá este como "mesías". Solo en el Libro de Daniel 9:25 vemos un vínculo explícito entre la reconstrucción de Jerusalén y la llegada del Mesías.
Esto cambia en el Talmud y el Midrash, donde el redentor es llamado mesías y descrito de múltiples formas. A veces es una figura militar o política. En otros, tiene habilidades sobrenaturales. Según una enseñanza talmúdica, en el Sanedrín 98a, el mesías ya está en la tierra, vestido como un mendigo arruinado, sentado a las puertas de Roma, esperando el arrepentimiento de los judíos. Según varias fuentes, el mesías nacerá en Tish'a B'av, el día de ayuno que conmemora la destrucción de los antiguos Templos.
Cuando el Mesías Vendrá
El Talmud registra una enseñanza en el Sanedrín 97a, atribuida al rabino Zeira, que no es prudente tratar de calcular la hora de la llegada del Mesías. Deriva esa práctica de esta enseñanza: “Hay tres asuntos que vienen solo por medio de la desviación de la atención y estos son: El Mesías, un objeto perdido, y un escorpión”. Otra enseñanza talmúdica sugiere que aquellos que intenten calcular el tiempo de la llegada del Mesías serán malditos. Maimónides luego respaldó este sentimiento, diciendo que los detalles de la llegada del Mesías son desconocidos y que uno simplemente debe esperar y creer.
Sin embargo, los rabinos del Talmud especularon considerablemente
sobre este asunto. Según una enseñanza, el mundo solo existirá durante 6.000 años, que es la fuente de la noción de que el mesías vendrá a más tardar en el año judío 6.000 (aproximadamente el año 2240 en el calendario gregoriano). Los rabinos también traen una serie de enseñanzas sobre las cualidades perturbadoras de la época anterior a su llegada, describiéndola de diversas formas como una época en la que disminuye el número de eruditos de la Torá, la herejía está muy extendida, los judíos desesperan de la redención y los jóvenes humillan a sus mayores. Un pronóstico particularmente sombrío proviene de una mishná en Sotah 9:15:
En los tiempos de la venida del Mesías, aumentará el descaro y se amontonarán los altos costos. Aunque la vid dé su fruto, el vino, sin embargo, será caro. Y la monarquía se volverá herejía, y no habrá quien reprenda sobre esto. El lugar de reunión de los Sabios se convertirá en un lugar de promiscuidad, y Galilea será destruida, y Gavlan (queda en lo que hoy es Persia) quedará desolada, y los hombres de la frontera irán de ciudad en ciudad en busca de caridad, pero no encontrarán misericordia. . Y la sabiduría de los escribas se pudrirá, y la gente que teme al pecado será asqueada, y la verdad estará ausente. Los jóvenes avergonzarán el rostro de los ancianos.Las relaciones familiares normales se arruinarán: un hijo deshonrará a un padre; una hija se levantará contra su madre, una nuera contra su suegra. Los enemigos del hombre serán los miembros de su casa. El rostro de la generación será como el rostro de un perro; un hijo nunca más se avergonzará delante de su padre. ¿Y en qué podemos confiar? Sólo sobre nuestro Padre que está en los cielos.
Estas enseñanzas son parte de la tradición de que la era mesiánica será precedida por hevlei mashiaj , literalmente “los dolores de parto del mesías”. Pero no todo es tan sombrío. Según varias enseñanzas, como esta de Shabat 11b, las acciones humanas pueden acelerar la venida del mesías:
El rabino Yoḥanan dijo en nombre de Rabí Shimon ben Yoḥai: Si tan solo el pueblo judío guardara dos Shabatot de acuerdo con su halajot, serían redimidos de inmediato.
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