Es realmente importante estar ahí para quienes han pasado por tanto. Escuchar sin juzgar y ofrecer un hombro amigo puede hacer una gran diferencia. Animar a buscar ayuda profesional también es clave, ya que terapeutas y psicólogos pueden ofrecer un soporte crucial en este proceso. Intentar involucrar en actividades que traigan alegría, como pasatiempos o paseos, puede ayudar a traer un poco de luz. Compartir recursos educativos sobre el bienestar emocional también puede ser útil. Es importante respetar el tiempo de cada uno en el proceso de curación y, si es de su comodidad, ofrecer soporte espiritual puede ser reconfortante. Recuerda, mostrar que te importa y que no está sola es ya un gran paso. Todos necesitamos apoyo, y estar al lado de alguien en momentos difíciles es un acto de amor y compasión. Espero sinceramente que mejoren y que bendiciones caigan sobre ustedes en este camino. Estaremos orando por ustedes. ¡Fuerza y fe siempre!