Cuenta ¡Por favor!

Mi mejor amiga sospechaba que el esposo le estaba siendo infiel el trabajaba en Choluteca, me dice que la acompañe a Choluteca a vigilar a su esposo porque lo quiere descubrir, me dice tiene que ser un viernes pues salen a parrandear, yo salgo de la oficina a las 5 PM, le digo a un amigo que tiene vehículo que nos lleve, nos vamos, llegamos a Choluteca le vimos todas las vueltas al susodicho y nada andaba solo, nada de parranda, bueno un santo, nos venimos de regreso a Tegucigalpa, medianoche yo no recuerdo muy bien por donde nos quedamos se nos pincha una llanta solo se que era un lugar oscuro sin luz y estaban arreglando en ese tiempo la carretera, Dios santo y mi amigo era un poco gordito le costó mucho sacar la llanta de respuesto no andábamos ni un bendito foco, horrible, solo todo aquello y nosotros varados ahí, en aquella oscuridad, bueno al final se colocó aquella llanta nos subimos y dice el amigo a la primera gasolinera revisamos esa llanta no confío, bueno veníamos en silencio los tres solo escuchábamos los grillos y ruidos normales de las noches en aquellos carbonales que abundan a la orilla de la carretera, cuando de repente empezamos a escuchar unos susurros, hablaban quedito , y mi amiga que venía a la orilla de la ventana da el grito y me dice que nos asustando, y nosotros mi amigo y yo nos quedamos viendo y le decimos a ella que nosotros no escuchábamos nada, para que ella se calmara pues gritaba llena de miedo, pero les juro que yo como esas películas de terror solo esperaba que nos cayeran encima del vidrio delantero porque esos susurros y hablar quedo nos acompaño como por cinco minutos, que miedo ...

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