Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo,
Santísima Trinidad, que todo lo puede,
te pedimos que nos guíes con tu sabiduría,
que nos fortalezcas con tu poder,
y que nos llenes con tu amor divino.
Padre celestial, creador del universo,
concede a nuestras vidas tu bendición infinita,
ilumina nuestro camino con tu luz eterna,
y danos la gracia de vivir conforme a tu voluntad.
Señor Jesucristo, Hijo amado de Dios,
salvador del mundo y redentor de nuestros pecados,
te pedimos que nos sostengas en nuestras pruebas,
que nos inspires con tu ejemplo de amor y servicio,
y que nos conduzcas hacia la vida eterna.
Espíritu Santo, fuego divino que nos animas,
consolador y guía en nuestras dificultades,
te suplicamos que infundas en nosotros tu fuego sagrado,
que nos llenes de alegría y esperanza,
y que nos concedas los dones necesarios para cumplir con tu misión.
Oh Santísima Trinidad, que todo lo puede,
te encomendamos nuestras vidas y nuestras necesidades,
confiamos en tu infinita misericordia y bondad,
y te alabamos y glorificamos ahora y por siempre.
Amén.