Un viaje planificado, un día esperado y la salida que no demoramos para poder disfrutar todo un día de paseo, camino, grabaciones y disfrute. Pero el día amaneció muy gris y la lluvia estaba allí. Igual decidimos salir con la esperanza de que el día iba a dar un giro y el sol nos iba a sorprender en alguna curva serrana.
Luego de pasar Alta Gracia y de dirigirnos hacia el camino de las Altas Cumbres buscando el desvío hacia Copina la llovizna y la niebla se hicieron presentes y persistentes. En un momento la duda nos asaltó y pensamos volver, hacer un giro y buscar un destino más citadino para pasar el domingo. Pero en ese momento entendimos que la imprevisibilidad de la vida la mayoría de las veces tiene un mensaje para darnos.
Habíamos buscado material antes de viajar, habíamos mirado fotos y videos de este camino, pero encontrarlo así invadido por las nubes, lleno de neblina y con una llovizna persistente nos estaba regalando un paisaje único, colores increíbles e imágenes de película.
Copina es un pequeñísimo paraje que se encuentra a 60 kilómetros de Córdoba y a unos 80 kilómetros de Mina Clavero. Es que era el lugar por donde se atravesaba antiguamente para poder conectar los dos valles, el Valle de Punilla y el Valle de Traslasierra. Se denomina Camino de los puentes colgantes de Copina a un tramo de apenas 30 kilómetros de la ruta provincial 14 que formaba parte del antiguo camino hacia las Altas Cumbres.
La geografía de la provincia de Córdoba con el imponente cordón montañoso de las Sierras Grandes, dificultó el traslado y las comunicaciones durante muchos años entre las poblaciones ubicadas a ambos lados de las sierras. Una persona muy importante para el desarrollo del Valle de Traslasierra fue el, hoy Santo, José Gabriel Cura Brochero que insistió con ahínco ante la clase política a nivel provincial y nacional el desarrollo de caminos, escuelas y centros de salud en el oeste cordobés. Sus pedidos fueron escuchados y es así que en el año 1915 comienza la gran obra que conectaría a los dos valles y que finaliza en el 1918. Fue una obra histórica para el país que comprendía 93 kilómetros.
La realidad de Copina fue muy especial en las décadas siguientes ya que con la construcción del camino, los pasarelas colgantes y las distintas pircas de defensas, drenajes, vados, todo implicó el trabajo de muchas personas y la necesidad de los servicios. Fue así que Copina tuvo su época de esplendor con dos hoteles, estafeta postal, surtidores de combustible, almacenes de ramos generales y escuela.
Pero el ocaso de esta pequeña población llegó cuando se comenzó a planificar y concretar el nuevo camino de las Altas Cumbres , obra que comenzó en los ‘60, que se realizó en diversas etapas y significó un gran cambio para toda la provincia de Córdoba.
Cinco puentes, cinco bellezas
Cada puente cuenta con cuatro pilares hechos con piedra y una sólida estructura metálica, llena de remate y tornillos, sobre las que se asientan las gruesas maderas que hacen de piso.
Al llegar a Copina, tuvimos que seguir por algunos pocos kilómetros de camino de tierra, siempre en ascenso, hasta llegar al primer puente. Es el único que no está en uso y que se lo rodea por el costado. El arroyo que vemos debajo está cubierto de vegetación y está rodeado de una gran quebrada. El camino continúa en constante ascenso y es así que llegamos al puente número 2 que se considera el más atractivo o en el que podemos permanecer por más tiempo ya que se puede acceder a dos cascadas realizando caminatas breves debajo del mismo.
El puente número tres se ubica en un espacio más abierto, con vegetación más baja y desde lo alto se pueden ver las playas de arena y aguas mansas. Desde allí se pueden hacer caminatas para acceder a miradores con vistas panorámicas.
Los puentes números 4 y 5 se ubican cercanos entre sí y al llegar a ellos cruzamos a amantes del ciclismo que hacen este trayecto desde el parador de Copina hasta el parador del Cóndor.
Este tramo es conocido también por pertenecer a uno de los trayectos del Raly Mundial y es visitado por miles de personas amantes de esta actividad.
Conocer este lugar y poder recorrerlo fue una experiencia maravillosa que nos conectó con las vivencias que hubo y que hay detrás de cada puente, con parte de la historia de nuestro país, de nuestra provincia, con parte del desarrollo y de hoy percibir la belleza natural que todo esto nos dejó. Nos faltó el sol? Si, nos faltó pero el día tuvo mucho sentido en esas nubes envolventes. Y sí, al sol y a las vistas panorámicas volveremos a buscarlas.
Música:
Quedate un ratito más - Mati Zapata • “QUÉDATE UN RATITO MÁS...
Doña Ubenza - Guille Vignolo y Ezequiel Ledesma • Doña Ubenza - Guille V...