Todas las canciones importantes de su carrera las ha escrito en un pequeño estudio en casa de sus padres, en Benalmádena. “Está en el garaje y es un zulo superpequeño. Hace unos años tenía puestas en la pared unas cajas de huevos para insonorizarlo”, cuenta Pablo Alborán (Málaga, 1989) con una media sonrisa en el vídeo de esta noticia, el segundo episodio del formato Historia de una canción de EL PAÍS.
Desde entonces, han pasado muchas cosas. Una carrera llena de éxitos, cinco discos, tres nominaciones a los Grammy, un parón de dos años en su carrera… Sin embargo, componer en este cuartito de casa de sus padres -a la que vuelve todos los veranos y Navidades- es algo que no ha cambiado. Fue en ese lugar donde también nació Saturno. “Allí siento que tengo el tiempo para profundizar en las cosas que me interesan como, por ejemplo, la historia del cuadro de Goya en el que Saturno está devorando a sus hijos. Me puse a buscar, se me fue la pinza y escribí este tema”, explica en el vídeo que acompaña a esta noticia.
¿Por qué inspiró al cantautor esta obra de Francisco de Goya? ¿Qué mensaje quería transmitir con este tema? ¿Cómo y cuándo la compuso? ¿Quién fue la primera persona que la escuchó? ¿Qué nos ha robado Saturno tal y como canta en la canción? Todas estas preguntas encuentran respuesta en el vídeo que acompaña este texto.
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