El 24 de junio de 1520, el ejército hispano-tlaxcalteca entra en Tenochtitlan por Tlatelolco y logran reunirse con las fuerzas del capitán Pedro de Alvarado.
En Zultepec, los Acolhuas, aliados de Tenochtitlan, apresan a una caravana conformada por unas 550 personas (castellanos, indígenas tlaxcaltecas, totonacas, mayas y taínos; así como negros y mulatos de origen africano), provenientes de la Villa Rica de la Vera Cruz y cuyo objetivo era llegar a Tenochtitlan.
Son encerrados en cárceles improvisadas en las casas de muchos de sus pobladores y destinados a rituales varios que “buscaban restituir el equilibrio cósmico tras la llegada de los hombres extraños” y la “transmutación de energía”. Estos sacrificios duraron aproximadamente seis meses (hasta diciembre de 1520 o enero de 1521) y a partir de entonces los pobladores residentes renombraron su lugar a Tecoaque (lugar dónde se comieron a los señores o dioses).
Producción: Ana Galicia
Realización: Gabriel Lomelín
México, 2020