La 525DSX completa la gama trail turismo de Voge, enfocada a los usuarios del carnet A2, y que supone un avance respecto de la 500DSX al aumentar su cilindrada y su cifra de par. Mantiene, además, el empleo de componentes de calidad en la parte ciclo y sobresale por su equipamiento de serie.
Dentro de este último apartado, destacar su pantalla parabrisas regulable de forma manual y sin herramientas dos posiciones e instrumentación digital con pantalla LCD de 7" que alerta, entre otros apartados, de la presión de los neumáticos y que incluye conectividad Bluetooth para atender llamadas y para acceder a un navegador. A todo esto hay que sumar su iluminación full-LED, los faros auxiliares y dos tomas de corriente, una de 12V y otra USB. Las defensas laterales, los cubremanos, el porta bultos trasero, las estructuras laterales para las maletas y el caballete central también se incluyen de serie.
Estéticamente, la 525DSX brilla por su imponente presencia, con un frontal característico con su pico de pato, pero no resulta una moto excesivamente complicada para los pilotos de menor talla gracias a su asiento situado a 830 mm del suelo. El depósito, con una capacidad de 16,5 litros -350 km de autonomía-, es estrecho en la parte que toca con el asiento para no obligar a abrir en exceso las piernas.
La principal novedad respecto de la versión anterior es el montaje de un nuevo motor, que ya estrenó la 525ACX, un bicilíndrico de 494 cc, con cuatro válvulas, doble árbol de levas el cual, tras algunas modificaciones interenas, crece en relación de compresión hasta los 11,5:1. También se han realizado modificaciones en el cambio de seis velocidades para adaptarlo a las nuevas características del motor. Estos cambios no afectan a la potencia máxima, que sigue siendo de 47,6 CV, el límite fijado para el A2, pero sí que aumente la cifra de par, ahora de 44,5 Nm, que además tiene una curva muy plana desde el bajo régimen, lo que permite una conducción más desahogada y un mayor empuje.