Рет қаралды 3,429
La cuarta generación del Suzuki Swift ya es un hecho, y es que en un mercado en el que la evolución es contante y sobre todo muy rápida, los fabricantes sólo tienen una opción: renovarse o morir.
El Swift ha conseguido convertirse en un pilar fundamental dentro de la gama de modelos de Suzuki, y es que desde que se presentara su primera generación como modelo global en 2004, ha conseguido acumular la increíble cifra de más de 9 millones de unidades comercializadas.
Partiendo de la misma plataforma que la anterior generación, el Suzuki Swift se renueva al completo para seguir siendo un interesante candidato para aquellos que estén buscando un vehículo urbano, con un gran equipamiento y un buen comportamiento dinámico a un precio comedido.
A falta de ponernos al volante, te desvelamos alguna de las claves de un modelo que llegará a los concesionarios a principios del mes de abril:
Más que una revolución, el nuevo Suzuki Swift ha tenido una importante evolución, y es que a pesar de que el diseño es totalmente nuevo y no comparte ningún elemento con el modelo al que precede, sí que respeta el ADN de la anterior generación.
Lejos del “gigantismo” que han vivido muchos de sus rivales, el nuevo Swift ha mantenido sus dimensiones para reafirmarse sin tapujos como un modelo del segmento B. De hecho, su longitud sólo ha crecido 2 cm respecto a la primera generación del modelo. Dicho esto, cuenta con unas dimensiones de 3.860 mm de largo y 2.450 mm de ancho, lo que le permite ofrecer una correcta habitabilidad en las plazas traseras y un maletero que, a falta de conocer la capacidad oficial, ofrece espacio más que suficiente para el día a día.
Los pilares A, B y C están acabados en un elegante color negro brillante, por lo que permiten un efecto de techo flotante que dinamiza bastante el conjunto.
Además de los nuevos faros y ópticas Led que le dan un aroma mucho más moderno, otra de las novedades del nuevo Swift es la ubicación del logo de la marca, que abandona la calandra para integrarse en la pintura y dejar espacio para un radar perfectamente integrado. El tirador de las puertas traseras vuelve a la puerta para dejar atrás el diseño enrasado en el pilar C.
Sin duda alguna, donde más se nota el salto evolutivo de la cuarta generación del Suzuki Swift es en su interior, y es que a pesar de que los materiales plásticos de tacto duro siguen siendo los grandes protagonistas, se ha optado por un diseño mucho más moderno con ajustes impecables.
Un nuevo salpicadero cuenta con una generosa pantalla táctil de 9 pulgadas mucho mejor integrada que en la anterior generación, ofrecer la sensación de estar ante un conjunto de mejor calidad.
El cuadro de instrumentos recibe un nuevo display a color de 4,2 pulgadas para ofrecer todo tipo de información de conducción y se ha mejorado su conectividad con la incorporación de dos nuevos puertos USB en la parte delantera.
Suzuki ha querido simplificar al máximo la oferta mecánica del nuevo Swift, por lo que al menos por el momento sólo estará disponible un pequeño propulsor tricilíndrico de gasolina con 1.2 litros de cilindrada con una potencia de 83 CV, suficientes para uno de los modelos más ligeros del mercado.
Tendrá un consumo de entre 4,4 y 4,6 l/100 km según el ciclo WLTP, el nuevo Suzuki Swift cuenta con el sistema SHVS de hibridación ligera de 12 V que se traduce en que todas sus versiones tendrán la etiqueta ECO.
El pequeño modelo japonés ofrece la posibilidad de escoger entre una transmisión manual de cinco velocidades o una transmisión automática CVT.
Equipado con la tracción total AllGrip Auto de Suzuki basada en un sistema de acoplamiento viscoso, el Swift se convierte también en una alternativa ideal para todos aquellos que necesiten un coche urbano que también les sirva para, por ejemplo, subir a la montaña los fines de semana.
La cuarta generación del Swift tendrá tres acabados, S1, S2 y S3, que contarán con un completo equipamiento de serie desde su versión más básica.
Tendrá una dotación de serie que incluye el sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de 9 pulgadas con Android Auto y Apple Car Play inalámbrico, sistema de navegación, control de crucero adaptativo, sensores de aparcamiento o cámara de visión trasera.
Además, se podrá escoger entre una amplia paleta de colores que incluye nueve acabados monotono y otros cuatro acabados bitono.
Desde su variante más básica podremos encontrar sistemas de asistencia a la conducción como el Asistente de Mantenimiento en Carril, el Sistema de Monitorización del Conductor, el Control Predictivo de Frenada, Alerta de cambio de carril, alerta antifatiga, asistente de luces de largo alcance, asistente de cambio de carril, reconocimiento de señales de tráfico, detección de ángulo muerto o alerta de tráfico posterior.